Cuentos a la crema


Caminó contra los jirones de fuego. Éstos no mordieron su carne, éstos lo acariciaron y lo inundaron sin calor y sin combustión. Con alivio, con humillación, con terror, comprendió que él también era una apariencia, que otro estaba soñándolo.

Jorge Luis Borges

 

…donde nadie sabía nada de los otros, donde todo el mundo miraba fijamente hacia adelante, exclusivamente hacía adelante.

Julio Cortázar

 

Las carcajadas suben, suben, se hacen agudas, estridentes. Los dos jadean, se atragantan, los ojos se van llenando de lágrimas, tartamudean.

Alma Maritano


La idea de escribir un libro de cuentos surgió a partir de una cantidad acumulada de poemas trazados durante largos años. Me planteé editarlos, con ciertos retoques, manteniendo una esencia minimalista. Lo que brotó, dejarlo despojado, sin vestidos. Existían cinco cuentos que me parecían interesantes de revelar. Dos terminados, dos a retocar y uno como ensayo, que merecía transformarse en cuento; publicarlos como un anexo final a los poemas. El brote se hizo luz y los cuentos crecieron a quince -primero-, a veinte -después-, hasta que me puse un tope final: treinta. La inspiración, esa misteriosa divinidad que aflora de la nada y que es todo, que fluye del más recóndito de los paisajes y de los oscuros y cálidos espacios de sensibilidad, imperfecta, explosiva, vino para molestar lo definido. Esa luz aportó más luces y todo quedó definido en treinta y tres cuentos. 

Cada cuento ha tenido sus estros y musas inspiradorxs, a ellas quiero regalarles mi reconocimiento. Las historias están inspiradas en caminos que vivencié, mixturadas con personas y personajes que circundan mi vida y con los duendes que se cuelan en mi mente para que afloren las historias. A muchas de ellas puedo regalarles un nombre; otras deben permanecer en el anonimato.

    Es importante citar, de las que sí puedo nombrar, que "Lamentos silentes (en barcos vacíos)" está dedicado a Juan Carlos Gould, que debe estar humeando música de la buena; "vainilla y frutilla" está dedicado a una luz que apareció, tan motivante como su sonrisa solo podía regalar, fuente de inspiración de todo el libro; "El pimpollo" está dedicado a Juliana Carcar Paván; "Medjugorje" está dedicado a la amistad con Diego Martínez, que la muerte no detuvo; "Nerina" está dedicada a Celeste y Sabrina Romero, y a mis amigas y admiradas María Belén Correa, Lohana Berkins, Vida Morant y la recordada Nadia Echazú; "El secuestro de Víctor" y "Un día de pesca" están dedicados a cada alma que alguna vez se alzó y gritó para que las cosas cambien en los años duros y oscuros de la última dictadura militar; "Un llamado desde Arnhem" es una punta al aliento hacia todas aquellas víctimas de las redes de proxenetas que trafican y tratan personas para someterlas a la prostitución y a sus familias para que jamás claudiquen en sus búsquedas, especialmente a Marita Verón y Fernanda Aguirre, emblemas de nuestro tiempo; "Té con leche" está inspirado en y dedicado a MG.

Cada cuento ha tenido sus estros y musas inspiradorxs, a ellxs quiero regalarles mi reconocimiento. Las historias están inspiradas en caminos que vivencié, mixturadas con personas y personajes que circundan mi vida y con los duendes que se cuelan en mi mente para que afloren las historias. A muchas de ellas puedo regalarles un nombre; otras es mejor que permanezcan en la impureza y el guiño que da el anonimato (se revela más data en la entrada anterior).

Los Cuentos a la crema son el ventiluz por donde asomarse a espiar. Son el juego que invita a andar, como Scorsese pintando su cine, los cines, despertando la cámara, las cámaras, que saltarán al jugo de la poesía en el siguiente libro. Allí, los Poemas al agua encienden los candiles, como danzas al compás de las sombras de Rimbaud y las luces sabinescas. Después, un puente al arcoíris de la diversidad con tantas admiradas plumas. Un libro final de un comienzo de compilaciones, los Escritos granizados. Rescates del arcón de la memoria y de un presente LGBT+ que me conmueve, que inspira, que deseo aventure otros prismas, un guiño más. 

El libro está dedicado a:
A Norma Varela, que iluminó mi camino

A la memoria de la abuela Josefa y de Blanca Cortiñas,
siempre oídos regalones a mis relatos

A continuación, encontrarán pasajes de los treinta y tres cuentos, con comentarios de la editora general, Neyda Pitt.




Foto de contratapa: Luis Madril


Índice de los cuentos


  • ·         vainilla y frutilla
  • ·         El pimpollo
  • ·         El beso de la luna
  • ·         Nerina
  • ·          La noche que vino George Harrison
  • ·         Espejos
  • ·         El secuestro de Víctor
  • ·         Isósceles
  • ·         Pehuen-Có
  • ·         Llegó la tía, y Damián
  • ·         Un día de pesca
  • ·         Dale campeón
  • ·         Las sombras
  • ·         Ruta 66
  • ·         Colores grises
  • ·         Q
  • ·         Andando por África y Kuala Lumpur
  • ·         Lamentos silentes (en barcos vacíos)
  • ·         Al despertar
  • ·         El chat
  • ·         El brote
  • ·         Pantuflas (una casa llena de locas)
  • ·         Un llamado de Arnhem
  • ·         CHTPT
  • ·         La invasión
  • ·         Medjugorje
  • ·         Té con leche
  • ·         Daniel
  • ·         El camino de las ovejas
  • ·         Esperando a los gusanos
  • ·         Crónicas de una fotografía
  • ·         El piscolabis
  • ·         33 de mano

Citas introductorias

Borges, Jorge Luis. Fragmento de “Las ruinas circulares”. Revista Sur, 1940. En 1941 fue incluido en la colección El jardín de senderos que se bifurcan, que más tarde formó parte de Ficciones (1944). 

Cortázar, Julio. Fragmento de “La autopista del sur” en Todos los fuegos el fuego. Santa Fe de Bogotá, Norma, (1966) 1991. 

Maritano, Alma. Fragmento de El visitante. Buenos Aires, Colihué, 1987.




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